La reina emérita de España, Doña Sofía, ha sido una destacada figura en el mundo artístico y cultural. En esta ocasión, se desplazó a París para participar en un evento conmemorativo de gran relevancia: la gala que celebra los 150 años de la apertura del majestuoso Palacio Garnier. Este icónico edificio, símbolo de la ópera parisina, fue testigo de una velada memorable que combinó música clásica y danza ballet.

La noche comenzó con la recepción protocolaria donde la reina emérita fue saludada por personalidades como Alexander Neef, presidente de la Ópera de París, y José Carlos Martínez, director del ballet. La gala ofreció un espectáculo excepcional dirigido musicalmente por Thomas Hengelbrock y coreografiado por Victoria Sita. Entre las voces destacadas se encontraban Ludovic Tézier y Lisette Oropesa, quienes interpretaron obras maestras de Ravel, Verdi y Rossini. El público también disfrutó de pasajes de ballet como "El lago de los cisnes".

Este encuentro es solo el primero de una serie de celebraciones planeadas para el año 2025, que incluirán exposiciones, conciertos y publicaciones especiales. El Palacio Garnier, creado por Charles Garnier durante el reinado de Napoleón III, sigue siendo uno de los destinos más visitados de París, fascinando a cientos de miles de amantes del arte cada año. La presencia de doña Sofía en este evento no solo honra su compromiso con las artes escénicas, sino que también fortalece los lazos culturales entre España y Francia, promoviendo el intercambio artístico y la cooperación internacional.