El equipo oficial Ducati enfrenta el inicio del campeonato con una mezcla de satisfacción y desafío. A pesar de la impresionante actuación de Marc Márquez, quien ha logrado tres victorias consecutivas, el entusiasmo sigue presente en el bando italiano. El jefe de equipo, Davide Tardozzi, destaca que la verdadera prueba llegará cuando Jorge Martín regrese a plenitud, augurando un aumento en la competencia. Además, expresa su admiración por Johann Zarco, destacando su desempeño sobresaliente durante las últimas carreras. Para Tardozzi, Marc es insuperable cuando alcanza su mejor estado físico, pero confía en que sus pilotos puedan acortar distancias.

Aunque Francesco Bagnaia (conocido como Pecco) se encuentra detrás de ambos hermanos Márquez, su actitud permanece serena. Reconoce que necesita mejorar en ciertas áreas técnicas para igualar su ritmo, particularmente en curvas específicas donde pierde tiempo valioso. Sin embargo, subraya que está progresando gradualmente y muestra optimismo sobre su capacidad para superar estos obstáculos. Su perspectiva se basa en la paciencia y la consistencia, atributos que cree lo llevarán a mejores posiciones en el futuro cercano. En lugar de enfocarse en las críticas externas, Bagnaia mantiene la calma y se centra en su propio desarrollo.

El mundo de las carreras motociclísticas demuestra constantemente que el éxito requiere no solo habilidad técnica, sino también una mentalidad resiliente. Los comentarios de Álex Márquez reflejan esta filosofía: aunque compite contra su propio hermano, su enfoque sigue siendo profesional y estratégico. Reconoce puntos fuertes y débiles en su desempeño y busca soluciones constructivas para mejorarlos. Este espíritu de mejora continua inspira tanto a sus compañeros como a los aficionados. En un deporte tan competitivo, la capacidad de mantenerse positivo y adaptarse a diferentes circunstancias es clave para alcanzar grandes logros.