Tras una larga carrera en el fútbol, Joaquín Sánchez ha decidido embarcarse en una nueva aventura junto a su familia. Este viaje no solo marca un punto de inflexión en sus vidas, sino que también se convierte en el escenario de un reality show llamado El Capitán en América. A través de este programa, los espectadores podrán acompañar a Joaquín, su esposa Susana y sus dos hijas mientras recorren la costa oeste de Estados Unidos en una caravana. Esta experiencia reveladora permite a Joaquín reconectar con su familia y descubrir nuevos aspectos de cada uno de ellos.

La decisión de Joaquín de retirarse del fútbol profesional fue cuidadosamente planificada, pero incluso después de prepararse mentalmente, el día después del retiro resultó ser más desafiante de lo esperado. “Lo único que he hecho en toda mi vida es jugar al fútbol”, reflexiona Joaquín. Sin embargo, gracias a su amor por la televisión, encontró una nueva pasión y una oportunidad para reinvención. El programa El Capitán en América surge como una continuación natural de su transición hacia este nuevo mundo, donde ahora puede compartir momentos íntimos y auténticos con su familia.

Este viaje no fue solo una simple excursión; fue una oportunidad para Joaquín de recuperar el tiempo perdido con su familia. Durante ocho capítulos, la familia Sánchez Saborido explorará lugares icónicos de Estados Unidos, desde las ciudades cosmopolitas hasta vastos desiertos. La clave del éxito del programa reside en su honestidad y autenticidad. Los productores han logrado capturar momentos verdaderos y espontáneos que reflejan la dinámica familiar de una manera única. “Nunca había visto tanta realidad y verdad como la que muestran Joaquín y su familia”, afirma Carmen Ferreiro, directora de Entretenimiento de Atresmedia.

La cercanía forzada en una caravana durante el viaje permitió a Joaquín y su familia estrechar sus lazos emocionales. “Las horas de viaje en caravana fueron momentos mágicos que nos acercaron más”, comenta Joaquín. A pesar de los desafíos, el viaje fortaleció la relación entre padre e hijas, y permitió a Joaquín ganar confianza y comprender mejor a su familia. “Ha sido una experiencia brutal en todos los sentidos”, concluye el exfutbolista, destacando cómo esta aventura cambió sus perspectivas sobre la importancia de la familia y la autenticidad.

Al finalizar el viaje, Joaquín y su familia regresaron transformados. Este viaje no solo les permitió explorar nuevas tierras, sino que también les brindó la oportunidad de redescubrirse unos a otros. Aunque enfrentaron desafíos y momentos difíciles, estos experiencias sirvieron para fortalecer aún más sus lazos. En última instancia, El Capitán en América no es solo un reality show; es una celebración de la familia, la autenticidad y la conexión humana en su forma más pura.