La pareja de actores, Blake Lively y Ryan Reynolds, ha decidido no asistir a la ceremonia de los Globos de Oro que se celebrará este domingo. Esta decisión es sorprendente debido a la nominación de la última película de Reynolds, "Deadpool y Lobezno", en la categoría de Logros Cinematográficos y de Taquilla. Además, Hugh Jackman, coprotagonista del filme, tampoco acudirá al evento. En paralelo, Lively enfrenta una batalla legal con su compañero de reparto y director Justin Baldoni, quien ha negado las acusaciones de acoso sexual y campaña de desprestigio. Este conflicto ha tenido repercusiones profesionales para Baldoni, incluyendo su despido de la agencia WME.

Impacto Profesional y Personal de la Controversia

El caso legal entre Blake Lively y Justin Baldoni ha causado un revuelo significativo en Hollywood. La ausencia de Lively y Reynolds en los Globos de Oro resalta el impacto personal y profesional de esta disputa. A pesar de la nominación de la película protagonizada por Reynolds, la pareja ha optado por no asistir a la ceremonia, lo cual es inusual considerando la relevancia de la producción. Este gesto puede interpretarse como una señal de apoyo a Lively durante este momento delicado.

La controversia ha ido más allá de la mera ausencia en eventos públicos. El conflicto entre Lively y Baldoni ha llevado a consecuencias tangibles en sus carreras. Baldoni fue despedido de su agencia de representación WME, mientras que Liz Plank abandonó el podcast "Man Enough", en el que colaboraba con él. Estas acciones reflejan cómo las acusaciones han afectado no solo a las partes involucradas directamente, sino también a otros profesionales que trabajaban junto a Baldoni. Por otro lado, Lively ha recibido el respaldo público de varios colegas, quienes han expresado su solidaridad en redes sociales y declaraciones públicas.

Detalles de la Batalla Legal y Repercusiones

La batalla legal entre Blake Lively y Justin Baldoni ha sido intensa y pública. Lively presentó una denuncia contra Baldoni por acoso sexual y daño a su reputación. Las acusaciones han sido reforzadas con capturas de conversaciones de texto que supuestamente demuestran la intención de Baldoni de perjudicarla. Sin embargo, Baldoni ha negado rotundamente estas afirmaciones y ha emprendido acciones legales propias, incluyendo una demanda contra The New York Times por difamación.

Baldoni ha anunciado que planea hacer públicas las conversaciones completas entre él y Lively para proporcionar contexto a las acusaciones. Su equipo legal sostiene que las capturas de pantalla carecen de contexto y podrían estar siendo malinterpretadas. Mientras tanto, Lively ha encontrado apoyo en varias figuras del mundo del entretenimiento, lo que ha añadido una capa adicional de complejidad al caso. La situación ha llevado a cambios significativos en las carreras de ambos, con Baldoni enfrentando pérdidas profesionales importantes, mientras que Lively recibe respaldo público y continúa su trabajo en la industria.