En un paso significativo hacia la modernización del sistema de identidad en México, el gobierno propuso transformar la Clave Única de Registro de Población (CURP) en una identificación biométrica avanzada. Esta nueva versión incluirá datos como huellas dactilares y fotografía facial, convirtiéndose en una herramienta oficial obligatoria para registros administrativos en todos los niveles gubernamentales. Aunque aún se encuentra en etapa de propuesta legislativa, se espera que esta reforma fortalezca las capacidades de búsqueda y localización de personas desaparecidas mediante la integración con bases de datos forenses nacionales.

Detalles sobre la Implementación de la CURP Biométrica

En un anuncio reciente, la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum presentó un ambicioso plan legal destinado a modificar la Ley General de Población y otras normativas relacionadas con la desaparición forzada de personas. Este proyecto contempla la creación de una nueva CURP, que ya no será simplemente una clave alfanumérica, sino una identificación personal equiparable a la credencial del Instituto Nacional Electoral (INE). Sin embargo, a diferencia del INE, la nueva CURP biométrica estará disponible para todos los ciudadanos mexicanos, sin restricción de edad.

El proceso piloto llevado a cabo en algunos municipios de Veracruz reveló los requisitos necesarios para su obtención: acta de nacimiento certificada, copia de la credencial del INE vigente, copia del CURP actual y la captura de datos biométricos, como huellas dactilares, escaneo del iris y fotografía facial. Aunque no existe una fecha específica para su implementación masiva, se prevé que entre en vigor 90 días después de ser aprobada por el Congreso, donde Morena tiene mayoría.

Además, esta iniciativa busca reforzar el Sistema Nacional de Alerta, Búsqueda y Localización de Personas mediante la vinculación con el Banco Nacional de Datos Forenses, gestionado por la Fiscalía General de la República (FGR). Este banco centralizará información antemortem y postmortem, así como otros registros críticos, facilitando la identificación rápida de individuos en situaciones de emergencia.

La introducción de la CURP biométrica representa un avance tecnológico crucial en la gestión de identidad civil en México. Al integrar datos biométricos en una sola plataforma, se mejora notablemente la eficiencia en la búsqueda de personas desaparecidas y se reduce el riesgo de fraudes de identidad. Desde una perspectiva periodística, este desarrollo refleja cómo la tecnología puede ser utilizada para abordar problemas sociales complejos, destacando la importancia de equilibrar innovación con privacidad en tiempos de cambio digital.