En esta exploración de lo que podría ser, Alejandro Agresti nos presenta una obra argentina que cuestiona las fronteras entre realidad y ficción. A través de un relato donde los personajes deciden adoptar identidades ficticias durante sus encuentros, el director desafía nuestra percepción del mundo real y celebra el poder transformador del cine. Esta película, con su estilo deliberadamente nostálgico y sus diálogos abundantes, ofrece una experiencia cinematográfica única que invita al espectador a reflexionar sobre cómo vivimos nuestras vidas.
En Buenos Aires, dos desconocidos se encuentran casualmente en un cine tras la proyección de una clásica película estadounidense. Inspirados por lo que acaban de ver, deciden pactar algo extraordinario: cada vez que se reúnan, interpretarán las versiones más deseadas de sí mismos. Él, un aspirante a astronauta; ella, una novelista exitosa. En este intercambio creativo, no solo reinventan sus propias historias, sino que también se convierten en personajes de su propia imaginación. Con actuaciones destacadas de Eleonora Wexler y Luis Rubio, la narrativa fluye con elegancia mientras explora temas profundos sobre identidad y propósito.
La trama se desarrolla a lo largo de varias reuniones cargadas de conversaciones intensas y reveladoras, bajo la atmósfera evocadora de un pasado cinematográfico dorado. Los actores, vestidos con cuidado y hablando con un lenguaje refinado propio de otra época, transportan al público a un universo donde todo parece posible gracias a la magia de la ficción.
Desde su inicio hasta su conclusión, la película mantiene un tono poético y melancólico que resuena profundamente con aquellos que alguna vez han soñado con escaparse de la realidad cotidiana.
Esta creación de Agresti es un tributo tanto al cine clásico como a la capacidad humana de imaginar mundos mejores.
Lo que queda después de experimentar esta obra maestra es una sensación de libertad. Nos recuerda que todos tenemos dentro de nosotros la capacidad de reinventarnos y perseguir nuestros sueños, aunque sea solo por un momento. El cine aquí no es solo entretenimiento, sino una herramienta poderosa para explorar quiénes somos y quiénes podríamos ser. Como espectadores, salimos inspirados a mirar nuestro entorno con nuevos ojos, buscando aquellas pequeñas oportunidades que nos permiten trascender nuestras limitaciones diarias y crear nuestra propia historia.