La repostería tradicional se reinventa cada año en Sevilla, y este 2025 no es la excepción. En La Esencia, un obrador local ubicado en Mairena del Aljarafe, el arte culinario alcanza nuevas alturas con sus creaciones para la Cuaresma. Este establecimiento, liderado por Javier González, ha sorprendido a los amantes de la pastelería al introducir innovaciones que homenajean tanto a las recetas clásicas como a sabores casi olvidados.

Entre las especialidades que destacan esta temporada está una versión única de torrija inspirada en la poleá, un postre tradicional andaluz. Este manjar se elabora horneando sobre una masa de brioche casera, cubierto con una mezcla fragante compuesta por harina, especias y toques cítricos. La fórmula guarda un secreto intransferible: la dedicación personal heredada de generaciones pasadas. Con ingredientes simples pero cargados de historia, este plato evoca emociones profundas conectadas con la memoria colectiva.

El dulce tiene el poder de unir épocas y experiencias. En este sentido, La Esencia no solo ofrece un producto exquisito, sino también una invitación a disfrutar de momentos compartidos. Disponibles en varios puntos estratégicos de la provincia, estas torrijas son una oportunidad para experimentar cómo lo antiguo puede convivir perfectamente con lo moderno. Así, mientras caminamos por las calles de Sevilla durante estos días festivos, descubrimos que cada bocado nos acerca más a nuestra propia identidad cultural.