En un programa televisivo reciente, los espectadores tuvieron la oportunidad de participar en dos formas distintas de votación para decidir al ganador. Aunque Guilherme obtuvo una sólida preferencia en la modalidad oficial con más del 50% de los votos, Renata se destacó en la categoría "voto de la audiencia". Este último tipo de voto permitía múltiples elecciones por persona y terminó favoreciendo a Renata, quien lideró con amplio margen. La media entre ambos sistemas de votación finalmente coronó a Renata como la gran campeona.
En el contexto del programa, cada uno de los tres finalistas logró captar diferentes segmentos del público. En la primera fase de votación formal, donde cada persona podía emitir solo un voto, Guilherme sobresalió considerablemente con poco más del 50% de las preferencias. Esto colocaba a Renata en una posición cercana pero no decisiva, mientras que João Pedro ocupaba un lugar distante en esta ronda.
No obstante, cuando se abrió la posibilidad de votar repetidamente en la categoría "voto de la torcida", las dinámicas cambiaron drásticamente. Renata aprovechó esta oportunidad para movilizar a sus seguidores, quienes contribuyeron masivamente a su causa. Como resultado, alcanzó más del 60% de los votos en este formato, superando ampliamente tanto a Guilherme como a João Pedro.
Finalmente, al combinar ambas formas de votación, Renata emergió como la favorita general del programa. Su habilidad para conectar con una base de seguidores comprometidos resultó ser un factor clave en su éxito. Los organizadores destacaron la importancia de ambos métodos de votación, asegurando que todos los aspectos de la participación del público fueran considerados antes de anunciar al ganador.