El 87º aniversario del Rey Juan Carlos se celebró con una reunión emotiva en Abu Dabi, donde reside desde hace cuatro años. Este fin de semana especial reunió a familiares cercanos y amigos de diversas nacionalidades para disfrutar de momentos inolvidables. Entre los eventos destacados se encontraban un espectáculo de flamenco y una impresionante demostración de drones sobre las aguas del Golfo Pérsico. La presencia de sus hijas, las infantas Elena y Cristina, junto con varios de sus nietos, añadió un toque personal y afectuoso a la celebración.
La celebración comenzó el sábado por la noche en uno de los restaurantes del icónico Emirates Palace. Los invitados disfrutaron de una cena informal mientras un mago de renombre amenizaba la velada con trucos de mentalismo que dejaron a todos maravillados. A medida que avanzaba la noche, llegó el momento más esperado: el corte del pastel individual y el canto del "Cumpleaños Feliz". Este instante emotivo marcó el inicio de un fin de semana lleno de sorpresas y alegría.
El domingo, la festividad continuó con un evento aún más grandioso junto a la playa. El espectáculo comenzó con una actuación de flamenco, seguida de un despliegue de 500 drones que iluminaron el cielo con imágenes memorables. Estas incluyeron la península ibérica, la bandera española y mensajes de gratitud al monarca. Este regalo fue posible gracias a la generosidad del jeque Mohammed bin Zayed Al Nahyan, amigo cercano del Rey. La noche culminó con el corte de una segunda tarta, tras lo cual el Rey decidió retirarse, dejando a los invitados para seguir festejando hasta altas horas de la madrugada.
Este fin de semana no solo fue una celebración de cumpleaños, sino también un encuentro significativo que permitió acortar la distancia entre el Rey y su patria. Las emociones vividas durante estos días demostraron que, a pesar de los kilómetros que separan a don Juan Carlos de España, su espíritu sigue estrechamente ligado a su tierra natal y a sus seres queridos.