La duodécima edición de los Premios Feroz se desarrolló con un ambiente cargado de sentimientos y momentos memorables. El acto más emotivo de la noche fue el tributo rendido a la querida actriz Marisa Paredes, quien falleció recientemente. Pedro Almodóvar, director con el que trabajó en numerosas ocasiones, subió al escenario para ofrecer unas palabras llenas de cariño y respeto hacia su compañera. La audiencia respondió con una cálida ovación, demostrando así su admiración por la intérprete que dejó huella en el cine español.
El evento también estuvo marcado por el humor y las intervenciones inesperadas. El presentador del programa, Dani, mantuvo a la audiencia entretenida con sus ocurrencias, incluyendo comentarios sobre temas de actualidad como la separación de Leire Martínez de La Oreja de Van Gogh. Además, Bob Pop, narrador de la gala para La 2 de TVE, no dudó en hacer bromas relacionadas con premiados y situaciones contemporáneas, como cuando comentó sobre Shakira tras el reconocimiento a la serie Celeste. Sin embargo, uno de los momentos más hilarantes llegó con Yolanda Ramos, quien, junto a Daniel Guzmán, entregaba los premios al mejor guion y música original. Su intervención desenfadada, llena de sarcasmos y risas, capturó la atención de todos los presentes, recordándoles que incluso en los eventos más solemnes hay espacio para la espontaneidad y la diversión.
Los Premios Feroz 2025 celebraron no solo el talento y la creatividad en el mundo del cine y la televisión, sino también honraron la memoria de figuras icónicas como Marisa Paredes. Este tipo de homenajes nos recuerdan la importancia de valorar y recordar a aquellos que han contribuido significativamente a nuestras vidas a través de su arte. Asimismo, el humor y la espontaneidad presentes durante la ceremonia reflejan la capacidad del ser humano para encontrar alegría y conexión en momentos compartidos, reforzando la idea de que la cultura y el entretenimiento son esenciales para nuestra sociedad.