La presencia de Wojciech Szczesny ha marcado un antes y un después en el rendimiento del equipo azulgrana. Desde que el experimentado portero tomó las riendas, el Barcelona no ha conocido la derrota en nueve encuentros consecutivos. La llegada del polaco al primer equipo se produjo en la Copa del Rey ante el Barbastro, donde su actuación fue sólida, aunque sin grandes exigencias. Sin embargo, su verdadero desafío llegó poco después en la Supercopa, donde demostró destellos de su calidad con una intervención crucial que ayudó al equipo a vencer al Athletic por 0-2.
Uno de los momentos más significativos para Szczesny fue la final de la Supercopa contra el Real Madrid. A pesar de cometer un error que resultó en su expulsión, el conjunto catalán logró imponerse con una goleada de 2-5. Este incidente le costó perderse el partido siguiente contra el Betis, pero desde entonces, el polaco no ha dejado de brillar. Su actuación decisiva en Lisboa, frente al Benfica, fue un punto de inflexión. Aunque cometió errores, también tuvo intervenciones heroicas que fueron clave para el triunfo del Barcelona.
Szczesny ha jugado nueve partidos, encajando solo nueve goles, mientras que Iñaki Peña ha recibido 25 en 22 encuentros. Estos números hablan por sí solos y reflejan la confianza que Hansi Flick tiene en el guardameta polaco. Además, su veteranía y experiencia son invaluables para un equipo que ha estado sin competencia real en la portería desde hace tiempo. Con Marc-André ter Stegen aún en proceso de recuperación, la figura de Szczesny es fundamental para mantener el liderato y aspirar a grandes logros esta temporada. Su contribución positiva y constante demuestra que la experiencia y la calidad siempre marcan la diferencia en momentos cruciales.