La icónica serie televisiva Cuéntame, que se emitió durante más de dos décadas y concluyó en noviembre de 2023, dejó una huella significativa en el pueblo de Arahuetes (Segovia), donde se filmaron las escenas ambientadas en el ficticio lugar de Sagrillas. Sin embargo, más de un año después del final de la producción, el alcalde de Arahuetes ha expresado su descontento con los efectos negativos que el rodaje tuvo sobre la comunidad local. Las declaraciones del político han revelado una relación tensa entre el ayuntamiento y los productores de la serie.
El alcalde Pedro Francisco Blanco ha denunciado que la presencia de Cuéntame trajo consigo gastos adicionales sin compensación adecuada. Según sus palabras, la producción utilizó servicios públicos sin pagar por ellos, lo que generó frustración entre los residentes. La falta de aportes económicos significativos ha llevado a una percepción de explotación por parte de la producción.
Blanco describió cómo la serie se aprovechó de los recursos locales sin ofrecer beneficios tangibles. Los equipos de grabación conectaban a la red eléctrica municipal y usaban instalaciones municipales sin remunerar adecuadamente al pueblo. Esta situación provocó un sentimiento de desigualdad y resentimiento hacia los productores. Además, cuando se intentaba negociar mejores condiciones, la respuesta era siempre evasiva, lo que exacerbó aún más las tensiones. El alcalde llegó incluso a calificar esta experiencia como la mayor muestra de avaricia que había presenciado en su vida.
Aunque la serie presentaba a Sagrillas como un pueblo ubicado en Albacete, las escenas exteriores fueron filmadas en Arahuetes. La plaza principal junto a la iglesia de San Andrés se convirtió en el corazón de la narrativa, representando la casa de los Alcántara. Mientras tanto, los interiores se filmaban en estudios de Madrid, y las tierras de Antonio estaban inspiradas en una finca en Toledo.
El nombre de Sagrillas fue creado por los guionistas originales, quienes imaginaron un entorno rural que reflejara la España de mediados del siglo XX. La elección de Arahuetes como locación no solo dio fama al pueblo sino también oportunidades a sus habitantes, muchos de los cuales participaron como extras en la serie. Sin embargo, la ausencia de un acuerdo económico justo ha ensombrecido este legado, dejando una mezcla de orgullo y decepción en la comunidad local.