La película dirigida por Jacques Audiard ha marcado un hito en la historia de los Premios Oscar, pero no precisamente de la manera esperada. A pesar de recibir dos estatuillas, la cinta protagonizada por Karla Sofía Gascón se ha convertido en una de las producciones con más nominaciones perdidas. Este resultado ha generado una mezcla de sorpresa y decepción en la industria del cine.

El filme, que contaba con 13 candidaturas, solo logró alzarse con dos premios: Mejor Actriz de Reparto para Zoe Saldaña y Mejor Canción Original. Esta situación lo coloca junto a otras películas que han tenido un desempeño similar en años anteriores, como "Belinda" y "Becket". La controversia que rodea a la película parece haber influido significativamente en su rendimiento. Los tuits racistas de su protagonista, descubiertos justo antes de las votaciones, y otros escándalos relacionados con declaraciones del director sobre el idioma español, han dejado una huella indeleble en la memoria de los votantes.

El desempeño de Emilia Pérez pone de manifiesto la importancia de la responsabilidad social en la industria del entretenimiento. Las acciones y palabras de los creadores y actores tienen un impacto directo en cómo son percibidos y valorados sus trabajos. Este evento nos recuerda que el respeto y la empatía deben ser pilares fundamentales en cualquier proyecto artístico. Además, subraya la necesidad de fomentar un ambiente inclusivo y tolerante en todas las esferas de la sociedad.