Un paso significativo en la lucha contra el tráfico local de sustancias ilícitas se ha dado en la provincia de Neuquén. Gracias a un acuerdo entre el Ministerio Público Fiscal y el Ministerio de Seguridad, se ha establecido una colaboración para integrar datos provistos por la ciudadanía mediante diversas plataformas digitales. Este esfuerzo conjunto busca optimizar las investigaciones criminales relacionadas con la distribución minorista de drogas.
El compromiso institucional fue oficializado durante una ceremonia celebrada en la sede gubernamental, presidida por el gobernador Rolando Figueroa. En este marco, el fiscal general José Gerez destacó que los resultados obtenidos hasta ahora son fruto del trabajo conjunto iniciado hace tres meses. Según explicó, tras asumir la responsabilidad sobre la investigación de ventas al menudeo, se logró avanzar significativamente gracias a la coordinación interinstitucional. Ahora, con esta nueva medida, toda la información recopilada por la aplicación “Neuquén te cuida” será cruzada con los datos disponibles en el portal web del MPF, permitiendo desarrollar investigaciones más profundas orientadas a desmantelar redes criminales.
Por su parte, el ministro de Seguridad expresó su confianza en la implementación de nuevas herramientas tecnológicas como códigos QR para facilitar denuncias desde cualquier lugar. Esta innovación forma parte de los planes futuros contemplados en el convenio firmado hoy. Además, cabe mencionar que desde finales de febrero, las investigaciones relacionadas con el microtráfico dejaron de ser competencia de la justicia federal y pasaron a manos de la justicia provincial, reforzando aún más la importancia de este acuerdo.
La cooperación entre distintas instancias gubernamentales demuestra que, cuando existe voluntad común, es posible enfrentar desafíos complejos como el tráfico de drogas. Este tipo de alianzas no solo fortalece la seguridad pública, sino que también fomenta la participación activa de la sociedad civil en la construcción de comunidades más seguras y justas. La tecnología, utilizada de manera estratégica, puede ser una poderosa aliada en la lucha contra el crimen organizado.