En un informe revelador, el Instituto Alcaraz ha destacado los principales obstáculos que enfrentan las familias con menores diagnosticados con Trastorno del Espectro Autista (TEA). Entre las dificultades más significativas se encuentran la falta de información adecuada, la incertidumbre sobre tratamientos efectivos y el impacto emocional y práctico en la vida diaria. Este análisis refleja una realidad compleja donde tanto los niños como sus familias requieren mayor apoyo estructurado y recursos especializados.

Los datos obtenidos muestran que más de seis de cada diez familias experimentan problemas relacionados con la escasez de orientación al momento del diagnóstico. Según Sheila Alcaraz, codirectora del Instituto, este vacío informativo genera inseguridad sobre cómo abordar la situación a largo plazo. Además, muchas familias enfrentan desafíos significativos tras recibir el diagnóstico, particularmente en términos de equilibrio entre cuidar a su hijo y mantener una rutina personal sostenible.

El entorno educativo tampoco queda exento de críticas. Un porcentaje considerable de familias mencionó la insuficiente formación del personal docente respecto al TEA. Esto provoca limitaciones en la inclusión efectiva de estos estudiantes dentro del sistema escolar tradicional. Sheila Alcaraz resaltó que, aunque existen profesionales comprometidos que buscan superar estas barreras mediante esfuerzos individuales, estas excepciones no pueden compensar la falta de políticas institucionales sólidas.

Desde el Instituto Alcaraz, se propone una solución integral que incluya tanto atención específica para los menores como acompañamiento continuo para las familias. "Es necesario proporcionar herramientas prácticas, respuestas claras y apoyo emocional", enfatizó Alcaraz. Este tipo de estrategias podría ayudar a reducir el estrés y mejorar la calidad de vida de todos los involucrados.

Este estudio subraya la necesidad urgente de fortalecer los recursos disponibles tanto en el ámbito público como privado. Las familias no solo requieren diagnósticos precisos, sino también sistemas de soporte que les permitan enfrentar con confianza el camino hacia el bienestar integral de sus seres queridos.