En el corazón de la celebración deportiva más esperada del año en Estados Unidos, un ingrediente se destaca entre los sabores tradicionales: el aguacate. Este fruto mexicano ha ganado una importancia singular durante las fiestas del Super Bowl, convirtiéndose en un elemento esencial para las reuniones y fiestas que rodean este evento. La popularidad del guacamole ha llevado a un aumento significativo en las exportaciones de aguacate desde México, especialmente desde el estado de Michoacán, que proporciona la mayoría de estos valiosos frutos.
Cada año, en el mes de febrero, cuando llega el gran día del fútbol americano, las mesas se llenan de platillos tradicionales estadounidenses como nachos, alitas y hotdogs. Sin embargo, es el guacamole quien roba el protagonismo. Esta preparación, originaria de México, ha traspasado fronteras y se ha adaptado perfectamente al gusto de los espectadores estadounidenses. En esta época festiva, el aguacate se convierte en el ingrediente estrella, no solo por su sabor único y textura cremosa, sino también por la tradición culinaria que representa.
Las cifras hablan por sí solas: en enero de este año, se enviaron 110,000 toneladas de aguacate desde México a Estados Unidos, con un 80% proveniente de Michoacán. Héctor Avilés, gerente general de Abokados, lo describió como la "fiesta del aguacate". Este fenómeno no es nuevo; en 2024, se rompió el récord con 130,000 toneladas transportadas, demostrando la creciente demanda y la importancia cultural de este fruto.
Desde hace años, la mezcla de sabores tex-mex ha encontrado su lugar en las celebraciones del Super Bowl. El guacamole, con su presencia constante, simboliza la fusión culinaria entre dos culturas, ofreciendo un deleite gastronómico que complementa perfectamente la emoción del juego.
Como periodista, observo cómo este fenómeno refleja la diversidad cultural que caracteriza a Estados Unidos. El aguacate, más allá de ser solo un ingrediente, se ha convertido en un puente entre tradiciones, uniéndolas en torno a un momento compartido de entretenimiento y camaradería. Es fascinante ver cómo un simple fruto puede tener un impacto tan significativo en la cultura y en las costumbres sociales.