El combinado nacional femenino de España se encuentra en una situación crítica, a pesar de poseer una plantilla con gran proyección de futuro. Este grupo de jugadoras, que incluye talentos en ascenso como Vicky López y Clàudia Pina, está destinado a brillar en el Mundial de Brasil 2027. Sin embargo, la Federación Española de Fútbol mantiene un hermetismo absoluto en torno al destino de su actual entrenadora, Montse Tomé, cuyo vínculo contractual expira inminentemente a finales de agosto. Esta falta de claridad contrasta con el apoyo público recibido de figuras como Rafael Louzán, presidente de la RFEF, quien ha elogiado la labor de Tomé, especialmente por su capacidad para mantener un ambiente positivo en el equipo tras periodos turbulentos.

La permanencia de Montse Tomé en el banquillo ha sido objeto de especulación, intensificada tras la final de la Eurocopa. Aunque no se esperaba una decisión inmediata debido a la inminencia del torneo, la falta de un pronunciamiento posterior a la final ha generado más dudas. La presión sobre Tomé no solo proviene de la incertidumbre contractual, sino también de las críticas a ciertas decisiones tácticas durante la Eurocopa, como los cambios de jugadoras clave en momentos decisivos y las elecciones en la tanda de penaltis. No obstante, es importante recordar que fallaron no solo las jugadoras jóvenes, sino también figuras experimentadas como Aitana Bonmatí y Mariona Caldentey.

La decisión sobre la dirección técnica es vital para consolidar el progreso del fútbol femenino español. La selección ha experimentado un crecimiento notable, con una mezcla de veteranas y jóvenes talentos que prometen un dominio continuado en el panorama internacional. Para asegurar que este proyecto siga prosperando, la RFEF debe proporcionar estabilidad y continuar fortaleciendo la estructura de apoyo al fútbol femenino. Esto implica no solo un liderazgo técnico definido, sino también el compromiso de fomentar una base de aficionados sólida y leal que acompañe al equipo más allá de los éxitos puntuales, garantizando así un futuro brillante y duradero para la \"Roja\" femenina.

La transparencia y la toma de decisiones oportuna por parte de las instituciones deportivas son cruciales para el desarrollo y la estabilidad de cualquier proyecto, especialmente en el ámbito del deporte de élite. Un liderazgo claro y un respaldo firme a los talentos emergentes son pilares fundamentales para construir un futuro exitoso y asegurar que el potencial de las nuevas generaciones pueda desarrollarse plenamente, inspirando a la sociedad y promoviendo valores de resiliencia y trabajo en equipo.