Desde las montañas desérticas de Palm Springs, Nicole Kidman pronunció palabras que resonaron más allá del escenario. Agradeció profundamente a Halina Reijn, directora de "Babygirl", por otorgarle la oportunidad de interpretar un personaje tan complejo y desafiante. Sin embargo, fue cuando mencionó a sus padres, especialmente a su madre Janelle Ann Kidman, que la emoción se apoderó de ella. La pérdida de su madre apenas unos meses antes había dejado una herida profunda en su corazón.
Kidman explicó que había estado de luto durante las fiestas navideñas junto a su familia en Australia. Cuando recibió el reconocimiento en Venecia por su actuación en "Babygirl", la noticia del fallecimiento de su madre le llegó como un golpe inesperado. En aquel entonces, Halina Reijn tuvo que subir al escenario para recoger el premio en su nombre, dedicándolo a la memoria de Janelle Ann Kidman. Ahora, en Palm Springs, Nicole aprovechó la ocasión para expresar personalmente su gratitud y amor hacia su madre.
El público presente en el Centro de Convenciones de Palm Springs quedó impactado por la sinceridad y vulnerabilidad de Kidman. Ella admitió estar aún conmovida y luchando contra las lágrimas mientras agradecía por la oportunidad de honrar a su madre desde el escenario. “Esto es para ti, mamá”, declaró entre sollozos. Su carrera siempre ha sido una dedicación a sus padres, quienes ya no están presentes físicamente, pero cuya presencia sigue siendo palpable en cada uno de sus proyectos.
La estrella también agradeció a la comunidad cinematográfica por brindarle la plataforma para seguir explorando roles que ama. Prometió continuar trabajando en lo que realmente disfruta, haciendo papeles que reflejen su pasión y compromiso con el arte. Esta promesa no solo es un homenaje a su madre, sino también una declaración de intenciones sobre su futuro en la industria del cine.
El discurso de Jamie Lee Curtis antes de entregar el galardón añadió otro nivel de profundidad a la noche. Ambas actrices han trabajado juntas en la serie "Scarpetta" para Prime Video, donde interpretan a dos hermanas. Esta colaboración ha fortalecido su amistad y les ha permitido conocerse mejor. Curtis destacó que el verdadero secreto del éxito de Kidman radica en su capacidad para amar y ser amada. “El centro de Nicole Kidman es el amor… El amor es su ingrediente secreto. Es el centro de todo”, afirmó Curtis conmoviendo a todos los presentes.
Cuando se analiza la obra y la vida de Nicole Kidman, todo se reduce al amor. Amor por la familia, amor por el arte, amor por la comunidad y amor por sí misma. Esta verdad simple y poderosa resalta la importancia de las relaciones humanas en su carrera y en su vida personal. Sin duda, "Babygirl" será recordada no solo por los premios que ha recibido, sino también por el tributo emocional que representa para la memoria de su madre.