El tenista italiano Jannik Sinner se enfrenta a una sanción de tres meses por dopaje, que lo mantendrá fuera de las canchas hasta el 9 de mayo. Sin embargo, su equipo ya está trabajando en la planificación del regreso del joven jugador al circuito profesional. A pesar de la suspensión, Sinner ha aprovechado este tiempo para descansar y entrenar en lugares privados, mientras que su equipo busca alternativas para mantenerlo en forma y preparado para competir nuevamente.
La preparación para su retorno incluye no solo encontrar lugares adecuados para entrenar, sino también buscar compañeros de práctica que le ayuden a mantener su nivel competitivo. El objetivo es asegurar que Sinner pueda retomar su carrera con la misma fuerza y determinación que mostraba antes de la sanción.
Sin embargo, este período de inactividad no ha sido completamente negativo para el deportista. Sinner ha utilizado estos días para desconectar y pasar tiempo con su pareja, la también tenista Anna Kalinskaya, en Dubai. Este breve respiro le ha permitido alejarse del escrutinio mediático y reflexionar sobre su futuro en el tenis.
Tras el anuncio de su sanción, Sinner decidió tomar un breve receso en Dubai, donde pudo disfrutar de unos días de tranquilidad junto a su pareja. Durante este tiempo, el jugador tuvo la oportunidad de distanciarse del revuelo generado por su caso y centrarse en su bienestar personal. Además, aprovechó las instalaciones privadas del Emirato para realizar algunas sesiones de entrenamiento, lo que le ayudó a mantenerse activo sin llamar demasiado la atención. Esta pausa fue crucial para que Sinner pudiera procesar los acontecimientos recientes y planificar sus próximos pasos con mayor claridad.
Mientras tanto, el equipo de Sinner trabaja incansablemente para garantizar que el tenista esté listo para volver a competir en óptimas condiciones. La búsqueda de lugares adecuados para entrenar y la selección de compañeros de práctica son aspectos cruciales en esta etapa de preparación.
El equipo de Sinner ha estado explorando diversas opciones para que el jugador pueda seguir entrenando durante su periodo de sanción. Entre las posibilidades se encuentran pistas privadas en Alicante o en la Riviera francesa, donde Sinner podría continuar desarrollando su juego sin restricciones. Además, se están buscando compañeros de entrenamiento que puedan ayudarle a mantener su nivel competitivo y prepararse adecuadamente para su regreso. El objetivo es asegurar que, cuando Sinner vuelva a las canchas, lo haga con la misma intensidad y habilidad que demostraba antes de la interrupción. A partir del 13 de abril, presumiblemente en Montecarlo, donde reside, Sinner podrá entrenar libremente y comenzar a planificar su participación en torneos importantes, como aquellos en tierra batida.