Un valioso manuscrito de Hernán Cortés, el célebre conquistador español, con más de quinientos años de antigüedad, ha sido exitosamente recuperado y repatriado a México. Este documento, que forma parte de la rica herencia histórica del país, fue objeto de un robo hace décadas y su reciente devolución subraya la importancia de la colaboración internacional en la preservación del patrimonio cultural. La intervención de las autoridades estadounidenses, en particular del Equipo de Crímenes de Arte del FBI, ha sido crucial para identificar, autenticar y finalmente restituir esta significativa pieza a su legítimo lugar, consolidando así los lazos de cooperación en la lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales.
El documento en cuestión, fechado el 20 de febrero de 1527, lleva la firma original de Hernán Cortés. Según las investigaciones, este manuscrito detalla aspectos de la administración colonial temprana, específicamente los pagos en “pesos de oro” destinados a financiar futuras expediciones. La agente Jessica Dittmer, del Equipo de Crímenes de Arte del FBI, destacó la originalidad y la relevancia histórica del documento, que proporciona una visión invaluable sobre la expansión de Cortés después de la caída de la capital mexica en 1521 y sus ambiciones territoriales en lo que eventualmente se conocería como el Virreinato de la Nueva España.
La desaparición de este manuscrito, junto con otras catorce páginas, se detectó entre 1985 y 1993, durante el proceso de microfilmación de la colección del Archivo General de la Nación de México. No fue hasta 2024 que el gobierno mexicano formalizó la solicitud de asistencia al FBI, proporcionando detalles exhaustivos sobre las páginas faltantes y la forma en que fueron sustraídas. Esta información fue vital para que el equipo de crímenes de arte iniciara una exhaustiva búsqueda, utilizando bases de datos especializadas en objetos robados y fuentes de código abierto para rastrear el paradero del documento en Estados Unidos.
El proceso de recuperación no solo implicó la localización del manuscrito, que había pasado por varias manos, sino también la confirmación rigurosa de su autenticidad. Los investigadores lograron verificar la pieza gracias a un sistema de numeración con cera utilizado por los archivistas entre 1985 y 1986, un detalle clave que permitió asegurar su procedencia y originalidad. Aunque el manuscrito había cambiado de propietario en múltiples ocasiones, el FBI optó por no presentar cargos, priorizando su retorno a México. Esta es la segunda vez que el FBI restituye un documento de Cortés a México, ya que en 2023 se devolvió un manuscrito de 1527 relacionado con el pago de azúcar rosada.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha informado que en la última década se han recuperado más de 14,000 bienes culturales del país que se encontraban en diversas naciones de América, Europa y Oceanía. Estas restituciones se han logrado a través de entregas voluntarias y procedimientos legales, lo que refleja el compromiso continuo de México con la recuperación de su patrimonio histórico y la colaboración internacional en la protección de bienes culturales.