En diciembre, con permiso de julio y agosto, es más difícil mantener las buenas costumbres. Sin embargo, hay maneras de evitar engordar. Aquí te presentamos algunos trucos.

Las pautas clave para no engordar durante la Navidad

No comer hidratos de carbono por la tarde

Los expertos sugieren comer tostadas en el desayuno y pasta o arroz en el almuerzo. Pero cerrar el grifo a las cinco de la tarde es importante. Incluso la fruta, saludable en sí misma, es mejor en la primera hora del día. Por la noche, aporta demasiada energía en forma de carbohidratos complejos. Su poder saciante y beneficio para la salud digestiva son grandes ventajas.

Lactocena

Según el Dr. Leo Cerrud, para una dieta hipocalórica, cenar como vasallos es ideal. La lactocena, como tres yogures desnatados o un par de trozos de queso, es perfecta para cerrar el día sin irse a la cama con el estómago vacío. Pero no llenarla de calorías, de lo contrario pierde efectividad.

Elegir bien los aperitivos

Los aperitivos deben abrir el apetito, no saciarlo. Por ejemplo, el jamón, encurtidos, frutos secos, boquerones en vinagre, gambas y mejillones son buenos choix. En cambio, evitar patatas fritas, kikos, croquetas y hojaldres.

Hacer deporte

Quizás no al ritmo habitual, pero moverse y caminar son el mejor antídoto. Puedes mantener la rutina deportiva diaria con una pequeña tabla que sustituya los ejercicios clásicos. El invierno es el momento perfecto para hacer deporte y seguir hábitos saludables. También puedes hacer paseos por la ciudad y descubrir encantadores mercadillos y belenes.

Beber agua

Desde Altrient se recomienda evitar bebidas alcohólicas y optar por zumo de tomate o agua con gas y una rodaja de limón. La hidratación es fundamental, por ser saciante y depurativa. Puedes poner una alarma en el móvil si tienes dificultad en recordar beber agua.

El truco del ‘snack’Descansar

Laura Jorge, dietista-nutricionista, destaca la importancia del descanso, especialmente durante la Navidad cuando se suele trasnochar más. Las personas que duermen poco o trabajan a turnos tienden a querer comer alimentos poco saludables al día siguiente. Necesitamos descansar bien para tener energía y afrontar el día con ganas.