El sábado 14 de junio de 2025 quedará grabado en la memoria de los aficionados a los toros. La Glorieta vivió una jornada histórica gracias al desempeño excepcional de Morante de la Puebla y Marco Pérez, quienes consiguieron salir a hombros tras cortar orejas y rabo. En particular, destacó la actuación de Morante con un toro de Garcigrande que recibió la vuelta al ruedo. Los astados pertenecían a distintas ganaderías y presentaron características variadas.
Morante dejó huella con su faena magistral frente a un ejemplar destacado, mientras que Marco Pérez demostró carácter y habilidad para obtener también dos orejas en su turno final. Ambos toreeros brillaron ante una plaza casi llena bajo el calor veraniego.
Morante de la Puebla ofreció una interpretación artística inolvidable durante su intervención en Salamanca. Su conexión con el público fue evidente desde el primer momento, especialmente cuando enfrentó un toro de Garcigrande que destacó por su clase y bravura. Este animal fue premiado con la vuelta al ruedo debido a su comportamiento excepcional dentro del ruedo.
En su primera lidia, Morante mostró dificultades técnicas al aplicar tres pinchazos antes de rematar con un bajonazo, lo que le valió solo ovaciones. Sin embargo, en su segunda actuación, su maestría quedó plasmada mediante una estocada habilidosa que, aunque no fue suficiente para emocionar al público inicialmente, preparó el terreno para su faena cumbre. Finalmente, su tercer encuentro con un toro de Garcigrande culminó con una estocada trasera pero efectiva, seguida de un desprendimiento, lo que provocó el entusiasmo generalizado y el reconocimiento con dos orejas y el codiciado rabo.
Marco Pérez hizo historia en su tierra natal al consolidarse como figura principal junto a Morante de la Puebla. Su debut en esta plaza significó tanto para él como para los aficionados locales, quienes presenciaron cómo logró cortar dos orejas tras una actuación vibrante en su último compromiso.
En su primer intento, Marco utilizó una estocada que guardó posición, aunque acompañada de dos pinchazos adicionales, obteniendo palmas moderadas. En su segundo turno, nuevamente encontró complicaciones técnicas al realizar tres pinchazos antes de concluir con una estocada que dejó silencio entre los asistentes. No obstante, su perseverancia y talento se manifestaron plenamente en su tercer toro, donde ejecutó una estocada precisa, acompañada de un descabello tras aviso, lo que le permitió recibir el merecido reconocimiento de dos orejas. Así, ambos diestros salieron a hombros ante una plaza casi llena en una tarde memorable.