En una entrevista reciente, Ney reveló con profundo pesar que su madre no podrá asistir al estreno de su nueva película debido a su avanzada edad y delicado estado de salud. A sus 103 años, la madre de Ney enfrenta serias limitaciones físicas e incluso cognitivas, lo que impide que participe en este importante momento del cineasta.

Hace más de un siglo, esta mujer extraordinaria ha sido testigo de los cambios en el mundo y ha marcado profundamente la vida de Ney. Durante décadas, ella demostró una vitalidad impresionante, llegando incluso a gestionar personalmente un complejo agrícola con nueve empleados hasta los cien años de edad. Sin embargo, el paso implacable del tiempo ha dejado huella en su salud.

Actualmente, su condición es tan frágil que ya no puede reconocer a quienes antes eran familiares cercanos. Este deterioro progresivo ha generado una gran tristeza en Ney, quien ahora se encuentra en la difícil posición de aceptar que su querida madre no podrá compartir este hito artístico con él.

El impacto emocional de esta situación no pasa desapercibido para aquellos que conocen la historia de la familia. La ausencia física y mental de su madre resalta la inevitabilidad del ciclo de la vida y cómo afecta incluso a las figuras públicas más destacadas. Aunque el estreno promete ser un evento memorable, la sombra de esta pérdida anticipada seguramente acompañará a Ney durante la celebración.