En una declaración pública realizada el jueves, la alcaldesa de Mexicali se pronunció sobre las especulaciones relacionadas con el posible lugar de residencia del teniente coronel Julián Leyzaola. Aunque desmintió informes en redes sociales que sugerían que la comandancia de policía estaba siendo adaptada como vivienda para el oficial, confirmó que se está buscando un hogar seguro para él y su familia. La alcaldesa Norma Bustamante también mencionó que aún no han recibido una respuesta oficial del cuartel militar respecto a la solicitud inicial de alojamiento hecha por Leyzaola.
En una jornada cargada de rumores e incertidumbre, en el corazón de Baja California, la presidenta municipal de Mexicali enfrentó a los medios de comunicación para abordar un tema delicado: dónde residirá el recién nombrado jefe de policía. Según declaraciones oficiales, durante esta semana, se reveló que el teniente coronel Julián Leyzaola había solicitado formalmente al ejército mexicano la posibilidad de residir en un cuartel militar. Sin embargo, hasta ahora, dicha solicitud no ha sido resuelta.
Norma Bustamante, con un tono firme pero cauteloso, subrayó que no se encuentra en marcha ninguna modificación en las instalaciones policiales para convertirlas en una vivienda privada. En cambio, aseguró que el gobierno municipal está explorando opciones seguras fuera de la vista pública para garantizar tanto la protección personal del jefe policial como la de sus seres queridos.
Ante la insistencia periodística, Bustamante reafirmó que cualquier comentario adicional sería compartido en un momento más oportuno, citando razones de seguridad como justificación principal para mantener cierto hermetismo en torno al asunto.
Desde la perspectiva de un periodista, este caso refleja la complejidad inherente a la gestión de figuras públicas cuya seguridad requiere medidas extraordinarias. La decisión de buscar un hogar privado para el jefe de policía evidencia la necesidad de protegerlo frente a amenazas potenciales, destacando así la importancia de equilibrar transparencia gubernamental con precauciones necesarias. Este episodio nos invita a reflexionar sobre cómo los líderes deben lidiar con información sensible sin comprometer la integridad de quienes están al frente de la seguridad ciudadana.