El exfutbolista británico David Beckham pronunció un discurso conmovedor durante el Foro Económico Mundial en Davos, enfatizando la importancia de brindar igualdad de oportunidades a todas las niñas. En su intervención, destacó que cada niña merece tener las mismas posibilidades que los niños para alcanzar su máximo potencial, independientemente de las dificultades que puedan enfrentar debido a factores como la pobreza y la discriminación.
Beckham reflexionó sobre su propio éxito y cómo este fue posible gracias al apoyo incondicional de maestros, entrenadores y familiares. Reconoció que aunque sus hijos gozan de una vida cómoda, él mismo construyó su fortuna desde abajo. Como Embajador de Buena Voluntad de UNICEF durante dos décadas, aprovechó la ocasión para llamar la atención sobre los desafíos que enfrentan los niños más vulnerables del mundo, especialmente las niñas, quienes a menudo se ven limitadas por circunstancias fuera de su control.
Con pasión y emoción, Beckham expresó su sueño de que su hija Harper Seven, así como todas las niñas del mundo, puedan acceder a las mismas oportunidades que sus hermanos mayores. Subrayó la necesidad de acción colectiva e inversión para superar los obstáculos sociales y económicos que impiden el progreso de las niñas. Además, instó a los líderes mundiales a tomar medidas concretas para mejorar la situación de los niños más desfavorecidos. "Todo niño tiene derecho a soñar y, con el apoyo adecuado, puede transformar su vida", afirmó Beckham, reforzando la idea de que la educación y el empoderamiento son clave para un futuro mejor.