En una rueda de prensa llena de energía y detalles reveladores, el piloto Pedro Acosta compartió sus perspectivas sobre su participación en el Gran Premio de Jerez. Este evento representa un desafío especial para él, ya que marca una transición importante en su carrera deportiva, desde Moto2 a MotoGP. Acosta discutió temas como la importancia de Jerez en su calendario personal, las diferencias entre pilotar en circuitos amplios versus espacios más estrechos, así como su confianza en los probadores de KTM. Además, habló abiertamente sobre cómo han cambiado las carreras en términos de emoción y competitividad en años recientes.
El joven talento de MotoGP expresó su entusiasmo por competir en Jerez, un circuito cargado de simbolismo tanto para él como para los aficionados. Reconoció que este escenario es diferente debido a su naturaleza técnica: "Jerez es un circuito estrecho donde cada vuelta cuenta, y aunque puede ser complicado, el apoyo de la afición lo convierte en algo único". Aunque reconoce que no ha sido sencillo adaptarse al cambio desde motos más pequeñas, subrayó que el progreso mostrado hasta ahora indica que están en el camino correcto.
Uno de los aspectos clave que destacó durante la conferencia fue la relación con sus probadores técnicos, especialmente Dani Pedrosa y Pol Espargaró. A pesar de ciertas críticas sobre la efectividad del trabajo realizado, Acosta se mostró optimista y resaltó las cualidades de ambos. "Tenemos dos de los mejores probadores disponibles, pero también necesitamos que desde la fábrica se ajusten mejor los detalles", explicó. Su confianza en el equipo técnico se basa en ejemplos claros de mejora continua, como el avance logrado en Qatar.
Acosta también reflexionó sobre el estado actual de las carreras de MotoGP, comparándolo con épocas anteriores. Según él, los últimos años han visto una reducción en la diversión que ofrecían las competiciones debido a factores técnicos y reglamentarios. "Antes había más movimiento, más adelantamientos emocionantes", comentó, añadiendo que la eliminación de dispositivos aerodinámicos podría devolver algo de ese dinamismo perdido.
Más allá de las consideraciones técnicas, Acosta dejó claro que su objetivo en Jerez es dar todo en pista y disfrutar del calor de los aficionados locales. Expresó su deseo de protagonizar una vuelta triunfal memorable, señalando que "cada posición cuenta, pero cuanto más adelante, mayor será la satisfacción". Con 17 carreras aún por disputar, su actitud refleja una mezcla de calma y ambición, enfocándose en mejorar constantemente.
Pedro Acosta concluyó que el Gran Premio de Jerez representa una oportunidad única para demostrar su crecimiento dentro de la categoría reina. A través de su dedicación y el apoyo de su equipo, aspira a consolidar su lugar en el mundo del MotoGP. El desafío de adaptarse a diferentes tipos de circuitos y condiciones sigue siendo central en su estrategia, pero su fe en el potencial de KTM y su propio talento lo impulsa hacia adelante. Para él, cada carrera es una nueva oportunidad de brillar y conectar con los seguidores que lo acompañan en esta emocionante travesía.