Antes del inicio de la segunda semifinal del concurso de Eurovisión, un incidente inesperado sacudió a los organizadores y participantes. La Sociedad Suiza de Radiodifusión y Televisión (SRG SSR) anunció que varios individuos fueron expulsados del estadio St. Jakobshalle en Basilea tras interrumpir el ensayo de una artista israelí. Este acto provocó reacciones entre los organizadores, quienes recalcaron su compromiso por mantener un ambiente neutral y respetuoso. Mientras tanto, la cantante afectada, Yuval Raphael, ha manifestado su determinación para continuar representando a Israel en este evento global.
El altercado ocurrió durante la tarde del día previsto para la semifinal, cuando seis personas irrumpieron en el ensayo de la joven intérprete israelí. Armados con banderas y silbatos de gran tamaño, lograron perturbar momentáneamente la preparación de Yuval Raphael, quien interpreta la canción "New Day Will Rise". Según el comunicado oficial emitido por SRG SSR, los responsables fueron rápidamente identificados y escoltados fuera del recinto. Esta situación puso de relieve los esfuerzos continuos por garantizar un entorno seguro e inclusivo dentro del certamen musical.
Este episodio no es nuevo para Raphael, quien ya había enfrentado tensiones relacionadas con manifestaciones pro-palestinas días antes. Durante la alfombra turquesa realizada anteriormente, un manifestante fue detenido tras amenazar a la delegación israelí. A pesar de estos desafíos, la artista mostró su fortaleza al expresar públicamente su orgullo por representar a su nación. En entrevistas recientes, compartió cómo superó momentos difíciles como sobreviviente de un ataque terrorista en octubre de 2023, donde permaneció escondida durante horas junto a otras personas.
La canción seleccionada por Israel para este año rinde homenaje a Theodor Herzl y transmite mensajes de esperanza en tres idiomas distintos. Con su interpretación vibrante y emocional, Yuval Raphael busca conectar con audiencias globales mientras enfrenta las presiones inherentes al contexto político que rodea su participación. Este caso refleja cómo eventos culturales internacionales pueden convertirse en plataformas para discusiones más amplias sobre convivencia y respeto mutuo.
Con estas circunstancias detrás, los organizadores reiteraron su dedicación para asegurar que el resto del certamen transcurra sin contratiempos significativos. Por su parte, Yuval Raphael sigue enfocada en su objetivo principal: transmitir un mensaje positivo a través de su música y llevar orgullosamente la bandera de Israel ante millones de espectadores alrededor del mundo.