Un sondeo realizado por el CIS revela que aproximadamente seis de cada diez ciudadanos españoles consideran que la información proporcionada por el gobierno durante el reciente apagón fue insuficiente. Las percepciones varían significativamente según las afinidades políticas, con un marcado escepticismo entre los electores de partidos opositores. Además, una parte considerable de la población cree que el apagón pudo deberse a actos deliberados, como ciberataques, en lugar de ser simplemente un accidente técnico.
El estudio también destaca cómo este evento influyó en la vida cotidiana de los ciudadanos y sus expectativas frente a futuros incidentes similares. La mayoría valora positivamente el comportamiento solidario de los vecinos y subraya la necesidad de modernizar infraestructuras críticas para prevenir futuros apagones.
Las diferencias ideológicas marcan profundamente la interpretación del apagón eléctrico. Mientras que gran parte de los votantes de la derecha perciben falta de transparencia e incluso sospechan de actos intencionados, otros sectores manifiestan mayor confianza en la versión oficial gubernamental.
El análisis muestra que más de la mitad de los seguidores de Vox creen que el corte de energía tuvo motivaciones deliberadas, como posibles ataques cibernéticos o acciones encubiertas del gobierno. Esta percepción contrasta con aquellos que atribuyen el fenómeno exclusivamente a fallas técnicas o accidentes fortuitos. Las declaraciones de líderes políticos como Santiago Abascal han alimentado estas teorías al sugerir conexiones poco convencionales entre eventos políticos y el apagón.
El apagón dejó huella no solo en términos de infraestructura sino también en la dinámica social. Una amplia mayoría reconoce el buen comportamiento de sus comunidades durante la crisis, destacando valores como la cooperación y la solidaridad.
Los datos indican que mientras algunos experimentaron miedo, la mayoría enfrentó la situación con calma. Las principales preocupaciones giraban en torno a la imposibilidad de usar electricidad para cocinar, refrigerar alimentos y medicamentos, además de problemas con la conectividad móvil e internet. En respuesta, muchos recurrieron a herramientas básicas como radios de pilas, evidenciando la importancia de prepararse para emergencias. El 62% recurrió a la radio como fuente informativa, lo que refleja su relevancia aún en tiempos digitales. Asimismo, se observa una demanda generalizada de mejor comunicación oficial sobre causas y soluciones rápidas.