El año 2025 trae consigo una renovación en el mundo de las bodas, donde las mangas abullonadas y semitransparentes se imponen como un elemento clave. Estas prendas, inspiradas en estilos vintage, han conquistado a muchas novias gracias a su capacidad para transformar looks sencillos en estilismos sofisticados. Las redes sociales juegan un papel crucial en la popularización de estas tendencias, mostrando vestidos que combinan lo clásico con lo moderno. Desde diseños XL hasta creaciones desmontables, estas mangas añaden un toque especial a cada ceremonia.
La influencia medieval y romántica está presente en las últimas colecciones nupciales. Sara, quien se casó en Valladolid durante el verano, optó por un vestido de Reguillo Studio que destacaba por sus enormes mangas de ángel, plisado en la espalda y vaporoso. Este diseño refleja cómo los elementos históricos se fusionan con la moda actual, creando piezas únicas y personalizadas. Las novias buscan ahora más que nunca vestidos que no solo sean hermosos, sino también significativos y distintivos.
Otra tendencia que ha ganado terreno es el uso de vestidos desmontables. Marta, cuyo look nupcial se volvió viral, eligió un conjunto de Jesús Peiró compuesto por un vestido ajustado con cuello halter y un abrigo de plumeti con larga cola y mangas voluminosas. Además, incorporó un tocado tipo casquete de Balel Luxury Hats con bordado en pedrería. Esta elección permite a las novias cambiar de look durante la celebración, adaptándose a diferentes momentos del día.
Isabel, quien contrajo matrimonio en Madrid tras cinco años de relación, prefirió un diseño sobrio pero elegante de Romancera. El vestido jugaba con diversas telas y transparencias, manteniendo un cuello alto y mangas amplias. Detalles como el drapeado frontal y el escote invertido en satén otorgaban al vestido un aire contemporáneo sin perder la esencia clásica. Las mangas de bambula, una seda fina y casi transparente, añadían un toque etéreo al atuendo.
Las influencer también se suman a esta tendencia. Carmen Huertas, originaria de Jaén, confió en Alba del Brillante para crear un vestido simple pero con notas vintage y mangas historicistas. Acompañado de una mantilla, este diseño resaltaba la belleza tradicional de la región. Por otro lado, Paco y Aitana eligieron un vestido bohemio de Jesús Peiró para su boda en Alicante. Las mangas tipo jamón y el largo de manga francesa le daban un aspecto juvenil y fresco.
La mezcla de texturas también gana protagonismo en los vestidos de novia. Un ejemplo es el diseño de Paredero Quirós, realizado en tweed con mangas plisadas y un lazo en la espalda. Este contraste entre materiales logra acabados muy llamativos y siempre sofisticados. Asimismo, Castellar Granados presentó un vestido plisado con mangas abullonadas que competían en importancia con la falda y el cuerpo del diseño, resultando en una creación integrada y equilibrada.
Carola, quien se casó recientemente, eligió un vestido transformable creado por María Gadea. Con mangas fluidas y semitransparentes, este diseño incluía un velo inspirado en Grace Kelly. Los consejos de la diseñadora fueron cruciales para seleccionar las telas perfectas, como el crepe satén y la bambula de seda marfil. En tanto, Bárbara optó por un vestido de Beatriz Álvaro Novias con mangas abullonadas y un tejido en zigzag, ofreciendo una combinación única de formas y texturas.
Loreto, diseñadora y novia en Granada, dio forma a su propio look nupcial con un tejido plisado. El resultado fue un diseño vaporoso y romántico que, a pesar de las preocupaciones iniciales sobre las mangas largas, recibió numerosos halagos. Finalmente, Natalia, quien se casó con un diseño de Lola Martín, combinó una base de vestido recta con una sobrecamisa de encaje y mangas tipo jamón. Este look demostró ser cómodo y versátil, adaptándose a las necesidades de la ceremonia y la fiesta.
Cada una de estas novias ha contribuido a consolidar las mangas abullonadas como una de las grandes tendencias de 2025. Su capacidad para transformar un vestido sencillo en una obra de arte ha capturado la atención de muchas futuras esposas, quienes buscan un atuendo que refleje su personalidad y estilo único. Las redes sociales continúan siendo un escaparate ideal para mostrar estas creaciones, inspirando a otras mujeres a seguir esta tendencia nupcial.