Tras una ausencia de casi tres años, la artista Rigoberta Bandini ha vuelto con un espectáculo deslumbrante en el Icónica Fest de Sevilla. Con su nuevo álbum doble "Jesucrista Superstar" como eje central, presentó un show lleno de energía, cambios de vestuario y temas que reflejan su versatilidad artística. Desde himnos feministas hasta baladas personales, Bandini mostró múltiples facetas durante su actuación teatralizada. El evento marcó no solo su regreso a los escenarios, sino también una evolución significativa desde sus primeros conciertos.

Un Espectáculo Multifacético en la Plaza de España

En una noche memorable bajo las luces del Icónica Fest, Rigoberta Bandini encendió la Plaza de España con un concierto que comenzó con más de una hora de retraso pero compensó cada minuto perdido. Vestida inicialmente como una muñeca exuberante con largas pestañas postizas, gabardina amarilla y botas rojas, la artista transformó su apariencia varias veces a lo largo de la velada. Entre looks icónicos destacaron su versión de boxeadora y diva glamurosa de tonos fucsia.

El público se entregó completamente cuando interpretó "Ay, mamá", un tema feminista que la llevó al Benidorm Fest en 2022. Durante esta canción, Rigoberta y sus bailarinas exhibieron sus cuerpos sin complejos, celebrando la libertad femenina. También sorprendió bajándose del escenario para compartir momentos íntimos con sus seguidores, repartiendo chupitos mientras cantaba "Amore Amore Amore". Su marido, Esteban Navarro, participó activamente en el show, incluso realizando movimientos coreográficos humorísticos.

Con una duración de hora y media, el concierto mezcló canciones nuevas como "JAJAJA" y "Pamela Anderson" con éxitos antiguos como "In Spain we call it soledad". La interacción constante con el público y referencias autocríticas, como la burla sobre su experiencia en Eurovisión, añadieron un toque personal y cercano a la performance.

La aparición de Rigoberta Bandini en Sevilla no solo fue un acto musical, sino una declaración artística que combina diversión, reflexión social y conexión emocional. Este concierto demuestra que, después de un período alejada de los escenarios, la artista ha vuelto más fuerte que nunca, consolidándose como una figura indispensable en la música actual. Su habilidad para fusionar entretenimiento masivo con mensajes profundos inspira tanto a artistas emergentes como a fanáticos de larga data.