Vueling, la aerolínea española, ha defendido su decisión de desembarcar a un grupo de adolescentes de un vuelo que partía de Valencia con destino a París, citando graves preocupaciones de seguridad. La compañía afirma que los jóvenes manipularon elementos cruciales de la aeronave, como chalecos salvavidas y máscaras de oxígeno, lo que constituía un riesgo inaceptable. Este incidente ha generado un debate considerable, especialmente después de que en Israel surgieran acusaciones de antisemitismo, las cuales Vueling ha desmentido categóricamente, asegurando que la única motivación para la expulsión fue la seguridad operacional.

La controversia se intensificó con la intervención de figuras políticas, incluyendo al ministro israelí de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, quien calificó el suceso como uno de los incidentes antisemitas más graves recientes. Sin embargo, Vueling insiste en que sus protocolos de seguridad se activaron estrictamente debido al comportamiento indebido y desobediente del grupo, que puso en peligro la seguridad de todos a bordo, lo que llevó a la intervención de las autoridades para garantizar la integridad del vuelo.

Medidas de Seguridad Críticas: La Postura de Vueling

La aerolínea Vueling ha ofrecido una explicación detallada sobre la reciente expulsión de un grupo de jóvenes de un vuelo Valencia-París, destacando que la acción fue estrictamente motivada por razones de seguridad. La compañía ha precisado que los pasajeros manipularon equipos de emergencia esenciales, como los chalecos salvavidas y las máscaras de oxígeno, lo que, según Vueling, representa un riesgo considerable para la aeronave, el resto de los pasajeros y la tripulación. Esta manipulación de equipos y la desobediencia reiterada a las instrucciones del personal a bordo llevaron a la decisión de desembarcarlos, subrayando que la seguridad fue el único factor determinante.

Los informes de Vueling indican que los jóvenes intentaron retirar el cilindro de oxígeno de alta presión e interrumpieron las demostraciones de seguridad, ignorando las advertencias del personal de cabina. Ante la persistencia de esta conducta, que infringe las regulaciones de seguridad aérea, la tripulación solicitó la intervención del primer oficial y, posteriormente, de la Guardia Civil. La aerolínea ha negado enfáticamente cualquier insinuación de que la decisión estuviera relacionada con la afiliación religiosa de los pasajeros, reiterando su compromiso con la seguridad y el cumplimiento de las normativas aeronáuticas sin excepciones.

Reacciones y Acusaciones de Discriminación

El suceso ha provocado una oleada de reacciones, con medios de comunicación en Israel calificando a Vueling de “antisemita” y generando un debate sobre la posible discriminación. Sin embargo, la aerolínea ha refutado estas acusaciones de manera rotunda, enfatizando que respeta plenamente la expresión religiosa de sus pasajeros y que la medida tomada fue exclusivamente por razones operacionales y de seguridad. La compañía ha emitido un comunicado oficial donde desmiente categóricamente cualquier vínculo entre la decisión de la tripulación y la fe de los implicados, insistiendo en que el comportamiento de riesgo fue el factor decisivo.

La controversia escaló a nivel internacional con la participación del ministro israelí de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, quien expresó su fuerte desaprobación a través de redes sociales, aludiendo a un aumento de incidentes antisemitas. No obstante, Vueling mantiene que su personal tiene la obligación de actuar ante cualquier situación que comprometa la seguridad del vuelo, y que el incidente se trató como un asunto de incumplimiento de las normas de seguridad aeronáutica, culminando con la intervención de las autoridades para garantizar el bienestar de todos los presentes en la aeronave.