El invierno sigue imponiendo su presencia con temperaturas gélidas, pero esto no impide que las últimas tendencias de moda se hagan notar. Las semanas de la moda en París y Copenhague han ofrecido un sinfín de ideas para enfrentar el frío de febrero con estilo. Los desfiles y los looks callejeros nos muestran cómo combinar prendas clásicas con toques innovadores.
Las capas son esenciales cuando las temperaturas bajan, y las mujeres danesas son maestras en este arte. Unos jeans oscuros, una camisa rayada debajo de un suéter grueso crean un look elegante y adecuado para cualquier ocasión laboral. Por otro lado, los abrigos de pelo siguen siendo protagonistas indiscutibles del street style invernal. Estos diseños únicos, a menudo combinados con otros tejidos, pueden elevar cualquier outfit, como lo demuestran las influencers parisinas que incluso los emparejan con botas de pelo.
El traje continúa siendo una opción versátil y sofisticada, especialmente cuando se mezclan diferentes estilos y colores. Observamos cada vez más conjuntos donde las dos piezas del traje no son idénticas, sino que juegan con contrastes. Las gabardinas, particularmente las de efecto cuero con bolsillos grandes, compiten con los abrigos de pelo, complementando jerséis oversize y calzado cómodo. Las medias de encaje con detalles florales, favoritas de las parisinas, añaden un toque romántico a vestidos cortos y botas altas.
La moda siempre encuentra formas creativas de reinventarse. El 'doble denim' vuelve a ser una opción práctica y atemporal, mientras que combinaciones inesperadas como faldas de invitada con botas de agua y parkas se vuelven funcionales gracias al ingenio de las danesas. La chaqueta bomber, acompañada de bailarinas, ofrece un look elegante con un toque rebelde, perfecto para eventos casuales. Finalmente, los outfits monocromáticos en tonos berenjena o burdeos demuestran que apostar por una sola gama de colores puede ser sofisticado y fácil de llevar.
En esta temporada, la funcionalidad y la belleza van de la mano. Accesorios como la balaclava, inicialmente criticados, han ganado popularidad por su protección contra el frío y por agregar un toque distintivo a nuestros looks. Este invierno nos enseña que la moda puede ser tanto práctica como expresiva, permitiéndonos lucir bien mientras nos mantenemos cálidos y cómodos.