La capital española fue testigo de una celebración especial que honró a destacados miembros del mundo taurino. Entre los primeros en llegar al evento se encontraba el reconocido maestro Curro Vázquez, quien llegó acompañado por Antonio Miura y su hijo Eduardo. Tras la sesión de fotos, importantes figuras del ámbito mediático como José Antonio Sánchez y Alfonso Nasarre discutieron la relevancia de las iniciativas impulsadas por las comunidades autónomas, con el jurista Leopoldo González Echenique como figura central.

Pío García-Escudero, conocido defensor de la tauromaquia, ejerció como anfitrión junto al presidente del Senado, Luis Rollán. La ceremonia contó con la presencia de María Guardiola, presidenta de la Junta de Extremadura, y otros representantes de diversas regiones. El galardonado Albert Serra compartió el escenario con sus colaboradores, entre ellos Luis Ferrón, quien apoyó firmemente su proyecto cinematográfico. Numerosos personalidades del periodismo y patrocinadores de la Fundación Toro de Lidia también estuvieron presentes, liderados por Borja Cardelús y su equipo.

El acto reunió a una notable representación de matadores en activo y retirados, quienes quisieron ser parte de este momento histórico. Roca Rey entregó el premio a Albert Serra, mientras que Enrique Ponce, Cayetano y otros matadores acudieron para dar testimonio del evento. Además, empresarios taurinos y representantes de distintas comunidades autónomas asistieron para mostrar su apoyo. Este encuentro refleja el compromiso colectivo hacia una tradición cultural profundamente arraigada en España, demostrando que la tauromaquia sigue siendo un pilar importante de nuestra identidad nacional.