La cantante expresó su entusiasmo por formar parte del festival Global Citizen, que tendrá lugar antes de la cumbre COP 30 de la ONU sobre el clima en Belém, Brasil. Este evento representa una oportunidad única para destacar las riquezas culturales de una región a menudo subestimada. La artista ve este momento como un tributo a la cultura brasileña, resaltando cómo esta plataforma puede amplificar voces que históricamente han sido marginadas.
En el norte de Brasil se encuentra una vibrante escena musical llena de talento femenino. La celebración de esta diversidad cultural es clave para reconocer el valor de regiones menos visibles. La artista menciona nombres icónicos que han dejado huella en la música brasileña y pone énfasis en el papel central que desempeñan las mujeres en esta transformación cultural. A través de sus letras y presencia, estas figuras inspiran a nuevas generaciones.
Este evento no solo eleva la música brasileña al escenario mundial, sino que también promueve una narrativa inclusiva y representativa. Al brindar visibilidad a regiones olvidadas y celebrar el talento femenino, se fortalece una conexión más profunda entre cultura e identidad. Este paso hacia adelante refleja la importancia de reconocer y honrar la diversidad cultural como motor de cambio social positivo.