En la primera jornada del Gran Premio de España, José Antonio Rueda demostró un desempeño excepcional que lo colocó a la cabeza en la categoría de Moto3. Con una ventaja significativa sobre sus rivales, el piloto logró marcar un tiempo impresionante que lo acercó al récord de la pista. Además, su compañero Álvaro Carpe y otros competidores también mostraron un buen rendimiento, aunque quedaron lejos del liderazgo de Rueda. Este resultado ayudó al sevillano a recuperarse tras la decepción vivida en Qatar.
Otros pilotos destacados incluyen Furusato, Yamanaka y Piqueras, quienes consiguieron acceso directo a la Q2. Sin embargo, algunos corredores enfrentaron dificultades técnicas o accidentes durante la sesión, como Lunetta y Riccardo Rossi.
José Antonio Rueda marcó un hito con su desempeño insuperable en Jerez. Su tiempo de 1:43.770 dejó a sus rivales a más de un segundo de distancia, estableciendo una brecha considerable en la clasificación inicial. Este logro no solo refleja su habilidad técnica, sino también su capacidad para gestionar la presión en un evento tan importante como este.
Rueda ha mostrado una evolución constante desde la temporada pasada, donde ya dio muestras de talento. Tras la frustración de Qatar, donde un fallo mecánico truncó sus aspiraciones de victoria, el piloto ha redoblado esfuerzos para asegurar su posición entre los mejores. Su tiempo en Jerez está a punto de romper el récord histórico de la pista, lo que evidencia el nivel competitivo alcanzado por el equipo Red Bull KTM Ajo.
Más allá del brillo de Rueda, otros pilotos también han tenido actuaciones notables. Álvaro Carpe, compañero de equipo, ocupó la segunda posición, seguido por Furusato y Yamanaka, quienes aseguraron su lugar en la Q2 gracias a tiempos consistentes. Estos resultados subrayan la importancia de mantener un ritmo sólido desde el inicio de la temporada.
No obstante, varios corredores experimentaron contratiempos durante la sesión. Entre ellos destaca Lunetta, quien sufrió dos caídas, y Riccardo Rossi, incapaz de completar una sola vuelta debido a problemas técnicos. Estas adversidades resaltan la fragilidad inherente en las carreras de motociclismo, donde tanto factores humanos como mecánicos juegan un papel crucial. A pesar de ello, los equipos siguen trabajando incansablemente para mejorar antes de la siguiente etapa.