El exjugador de fútbol portugués Fabio Coentrao, quien actualmente se dedica a la industria pesquera tras su retiro del deporte, ha sido involucrado en un escándalo relacionado con el comercio ilegal de crustáceos. Según informó la Autoridad de Seguridad Alimentaria (ASAE), las autoridades han suspendido la actividad de tres almacenes no autorizados en el norte de Portugal y han incautado 17 toneladas de alimentos. Uno de estos almacenes pertenecía a Coentrao y contenía más de una tonelada de crustáceos que fueron confiscados debido a diversas irregularidades.
Coentrao, originario de una comunidad de pescadores en el norte de Portugal, decidió entrar en este negocio después de retirarse del fútbol profesional en 2021. Durante su carrera como jugador, representó a equipos de renombre como el Real Madrid, el AS Mónaco y el Benfica de Lisboa, acumulando 52 apariciones con la selección nacional portuguesa. Tras su retiro, el exdefensa de 36 años invirtió en tres barcos pesqueros y alquiló un almacén para iniciar su negocio de mariscos hace siete meses.
Las autoridades sanitarias llevaron a cabo inspecciones en el puerto pesquero de Póvoa de Varzim, donde descubrieron 12 tanques de agua salada llenos de especies como langostas y gambas. Estas operaciones carecían de facturas y licencias necesarias para su comercialización, lo que llevó a la incautación de los productos. La ASAE confirmó que uno de los almacenes implicados pertenecía al exfutbolista, lo que ha generado preocupación y debate sobre las prácticas comerciales en el sector pesquero.
Este incidente ha puesto bajo el reflector la transición de exatletas hacia nuevas actividades empresariales. Coentrao, quien proviene de una familia de pescadores, había buscado aprovechar su conocimiento y conexiones locales para establecerse en el sector pesquero. Sin embargo, este caso resalta la importancia de cumplir con todas las regulaciones y requisitos legales antes de emprender cualquier actividad comercial. El futuro del negocio de Coentrao ahora está en entredicho, mientras se espera que las autoridades continúen investigando el caso.