Un viaje que prometía ser una celebración deportiva se convirtió en una pesadilla para las familias del Real Mallorca durante su participación en la Supercopa de España en Arabia Saudí. Las esposas de algunos jugadores sufrieron acoso y situaciones inaceptables tanto dentro como fuera del estadio, lo cual ha provocado indignación y malestar. Este incidente ha dejado una profunda huella en quienes lo vivieron y ha generado críticas hacia la organización del evento.
El pasado jueves, tras el partido celebrado en el Estadio King Abdullah, varias mujeres acompañantes de los futbolistas del equipo mallorquín experimentaron un episodio perturbador. Cristina Palavra, esposa del mediocampista Dani Rodríguez, compartió su experiencia a través de una carta pública. Ella describió cómo, después de un vuelo largo y emocionante, lo que debía ser un día memorable terminó en angustia y miedo. El entusiasmo inicial por participar en este importante evento se vio empañado por el comportamiento hostil de algunos aficionados locales, quienes acosaron a las mujeres y sus hijos, llegando incluso a agredir físicamente a algunos espectadores.
Otras voces también se alzaron para relatar experiencias similares. Natália Kalužová, pareja del portero eslovaco Dominik Greif, narró en redes sociales cómo fueron arrastradas, tocadas sin consentimiento y grabadas sin permiso mientras intentaban moverse por el estadio. La situación no mejoró cuando salieron del recinto; siguieron siendo perseguidas y acosadas hasta llegar a los autobuses. Estos testimonios han llevado a cuestionamientos sobre la seguridad y la eficacia organizativa del evento.
Conchi Serra, esposa del jugador Antonio Sánchez, también expresó su descontento. En declaraciones a COPE, destacó que nunca antes había experimentado algo así en otros viajes con el equipo. Incluso mencionó que trabajadores del estadio, identificados con chalecos reflectantes, contribuyeron a crear un ambiente hostil. Los incidentes ocurridos han generado preocupación y reflexión sobre la protección de los visitantes en eventos internacionales de alto perfil.
Las declaraciones de estas mujeres han puesto de manifiesto la necesidad de mejorar la seguridad y la atención a los visitantes en eventos futuros. Mientras que la pasión por el deporte une a las personas, estos lamentables incidentes subrayan la importancia de garantizar que todos los asistentes puedan disfrutar del fútbol en un ambiente seguro y respetuoso.