El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha tomado medidas para exigir transparencia en el proceso que dejó fuera a esta ciudad como sede del Mundial de Fútbol 2030. En un anuncio realizado este viernes, declaró que se reunirá próximamente con representantes de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) para obtener toda la información relacionada con la exclusión. Criticando la falta de claridad y los supuestos criterios confidenciales aplicados por la RFEF, Caballero ha reiterado su demanda de justicia y transparencia.
En una decisión inesperada, la ciudad de Vigo fue excluida de la lista de sedes potenciales para el próximo Mundial de Fútbol 2030. El alcalde Abel Caballero ha manifestado públicamente su descontento y ha decidido actuar ante lo que considera una injusticia. Según él, no solo es crucial conocer las razones detrás de esta exclusión, sino también revisar todo el proceso seguido por la RFEF. Este lunes, en Las Rozas, Madrid, Caballero planea discutir con representantes de la federación temas clave como baremos, puntuaciones y procedimientos utilizados durante la evaluación.
Caballero ha destacado que desea acceso a todas las actas firmadas y documentos oficiales que respalden las decisiones tomadas. Argumenta que, en concursos públicos donde se asignan puntajes, no debería existir ninguna confidencialidad. Además, insiste en que la omisión de detalles relevantes podría apuntar hacia prácticas poco éticas. Asegura que buscará luz sobre cualquier irregularidad que pueda haberse presentado durante el proceso de selección.
La controversia ha generado un debate nacional sobre la integridad de la RFEF. Mientras tanto, Caballero está preparando acciones legales basadas en la evidencia obtenida en dicha reunión. Su objetivo principal es demostrar que Vigo merecía ser incluida como sede oficial debido a sus cualificaciones previamente reconocidas. Confiado en la rectitud de su causa, exige que la ciudad sea reinstalada como parte del plan inicial.
Con estas acciones, Caballero busca no solo defender los derechos de su ciudad, sino también establecer precedentes en cuanto a la transparencia en procesos futuros. Su postura refleja la necesidad de mantener altos estándares éticos en todas las instituciones deportivas nacionales, asegurando que decisiones tan importantes como la elección de sedes mundiales sean realizadas con total claridad y equidad.