La fusión de las tradiciones culinarias japonesas y catalanas ofrece un fascinante panorama cultural. La periodista Kyoko Kawaguchi, al mudarse a Barcelona, notó una gran divergencia en la forma en que ambas sociedades abordan la alimentación. En su libro "Shokuiku", Kawaguchi presenta la filosofía japonesa de la educación alimentaria, que va más allá de la cocina y se extiende a la conciencia sobre la producción de alimentos y los modales en la mesa. A través de recetas accesibles y anécdotas divertidas, Kawaguchi acerca esta perspectiva única a los lectores occidentales.
En este primer aspecto, se explora cómo la educación alimentaria en Japón trasciende el simple acto de cocinar. Desde temprana edad, los japoneses aprenden principios que guían sus decisiones alimentarias en la vida adulta. Este enfoque incluye no solo la preparación de comidas, sino también la importancia de comprender el origen de los alimentos y respetar las normas sociales durante las comidas. Kawaguchi destaca la relevancia de estos conceptos para fomentar hábitos saludables y conscientes.
La autora profundiza en cómo la educación alimentaria en Japón busca formar individuos que tomen decisiones informadas y éticas respecto a lo que consumen. Los niños aprenden sobre nutrición, seguridad alimentaria y el valor de apreciar cada bocado. Además, se les enseña a ser conscientes del impacto ambiental de sus elecciones y a reducir el desperdicio. Este enfoque integral busca cultivar no solo buenos comedores, sino ciudadanos responsables que respeten tanto a la naturaleza como a quienes comparten la mesa con ellos.
Kawaguchi presenta recetas adaptadas para que los lectores occidentales puedan experimentar la cocina japonesa sin complicaciones. Utilizando ingredientes fácilmente disponibles en supermercados locales, la autora facilita la preparación de platos típicos sin necesidad de buscar productos especializados. Sin embargo, reconoce la importancia de tres elementos esenciales: la salsa de soja, el miso y la salsa de curry, comparándolos con el aceite de oliva en la cocina mediterránea.
Entre las recetas destacadas se encuentra un sushi rápido que puede prepararse en menos de media hora, ideal para aquellos días ocupados. También se incluye una sopa de miso con almejas, perfecta para recuperarse después de una noche de excesos. Finalmente, el curry japonés al estilo de Kyoto ofrece un plato reconfortante y sabroso que combina armoniosamente sabores orientales con técnicas de cocción accesibles. Estas recetas, acompañadas de consejos prácticos y anécdotas personales, hacen que la experiencia de cocinar sea tanto instructiva como disfrutable.