Los bomberos forestales de la Comunidad de Madrid, pertenecientes a la empresa p\u00fablica Tragsa, han iniciado una huelga indefinida con el objetivo de lograr una mejora sustancial en sus condiciones laborales y la negociaci\u00f3n de un nuevo convenio colectivo. Desde el 15 de julio, estos trabajadores han estado moviliz\u00e1ndose, buscando visibilizar sus demandas, que van m\u00e1s all\u00e1 de lo salarial, e incluyen la estabilidad laboral y la protecci\u00f3n contra riesgos para la salud.
El pasado s\u00e1bado, el colectivo se reuni\u00f3 en la emblem\u00e1tica Puerta del Sol, frente a la sede del gobierno regional. Vestidos con sus uniformes de protecci\u00f3n y portando bengalas de humo rojo, los manifestantes expresaron su frustraci\u00f3n por la falta de un convenio actualizado, ya que el \u00faltimo data de 2008-2012, y por la p\u00e9rdida del 35% de su poder adquisitivo desde entonces. Adem\u00e1s, insisten en la aplicaci\u00f3n inmediata de la Ley B\u00e1sica de Bomberos Forestales, aprobada en 2024, que les otorgar\u00eda un reconocimiento profesional m\u00e1s adecuado.
Entre sus principales reivindicaciones, los bomberos forestales se\u00f1alan la necesidad de poner fin a la precariedad laboral, dado que aproximadamente el 40% del personal es contratado \u00fanicamente durante cuatro meses al a\u00f1o, coincidiendo con la campa\u00f1a de prevenci\u00f3n de incendios forestales (Infoma). Tambi\u00e9n demandan la implementaci\u00f3n de un plan integral de protecci\u00f3n contra agentes cancer\u00edgenos, una preocupaci\u00f3n creciente debido a su exposici\u00f3n constante a estas sustancias durante las labores de extinci\u00f3n y las quemas controladas.
Javier Villanueva, representante sindical de Firet en Tragsa, destac\u00f3 la urgencia de reabrir las negociaciones para un nuevo convenio colectivo que aborde no solo las condiciones econ\u00f3micas, sino tambi\u00e9n la mejora de las medidas de seguridad, la formaci\u00f3n continua y el reconocimiento de pluses por peligrosidad y toxicidad. La situaci\u00f3n actual de las bases, que en muchos casos no cumplen con las normativas de exposici\u00f3n a agentes nocivos, es otro punto cr\u00edtico en sus peticiones. La Comunidad de Madrid, seg\u00fan los trabajadores, tiene una obligaci\u00f3n legal de implementar protocolos que garanticen su salud y seguridad.
Pese a la huelga, que se extender\u00e1 hasta el 15 de agosto, con servicios m\u00ednimos del 80%, los trabajadores lamentan la postura de Tragsa y la falta de respuesta por parte de la Comunidad de Madrid. El contingente de brigadas forestales en Madrid asciende a unos 300 trabajadores fijos y 200 temporales, que se dedican a la prevenci\u00f3n en invierno y a la extinci\u00f3n en verano. A pesar de que la nueva ley podr\u00eda cambiar la denominaci\u00f3n de 'brigada forestal' a 'bombero forestal' a partir de 2026, lo que esperan es una mejora tangible y duradera de su situaci\u00f3n laboral.