La desaparición de Iris Apfel a los 102 años dejó un vacío imposible de llenar en el mundo de la moda. Sin embargo, su espíritu perdura a través de una subasta exclusiva organizada por Christie’s, que reúne más de doscientos objetos personales que reflejan su vida y su singular estilo. Desde gafas únicas hasta prendas de Alta Costura, cada pieza cuenta una historia de audacia y creatividad. Esta colección, disponible para los amantes de la moda entre el 28 de enero y el 13 de febrero, promete ser un evento memorable que honra la memoria de una mujer verdaderamente única.
El camino de Iris Apfel hacia la fama no fue convencional. Nacida en Astoria, Nueva York, en una familia dedicada al arte y la moda, Iris descubrió desde temprana edad su pasión por lo bello y vanguardista. Su educación en la Universidad de Wisconsin y su inicio en el mundo editorial le proporcionaron las herramientas necesarias para forjar una carrera excepcional. Sin embargo, fue su relación con Carl Apfel lo que transformó su vida. Juntos fundaron Old World Weavers, una empresa de textiles de lujo que pronto ganó reconocimiento en círculos sociales elevados. Además, su trabajo en la Casa Blanca durante nueve administraciones presidenciales consolidó su reputación como una visionaria del diseño.
El legado de Iris Apfel trasciende la moda. Su capacidad para convertir debilidades en fortalezas, y su actitud frente a la vida, son lecciones valiosas para todos. A pesar de comentarios críticos sobre su apariencia, Iris encontró en el estilo una forma de expresarse y de destacar. Su filosofía de "más es más" y su rechazo a las reglas establecidas inspiran a quienes buscan romper moldes y explorar nuevas posibilidades. En sus últimos años, se convirtió en una figura icónica que desafiaba estereotipos y celebraba cada día como si fuera el último. La subasta que se avecina es más que una venta de objetos; es un homenaje a una vida vivida con intensidad y originalidad.