La pollo, el pavo y la codorniz son conocidas por ser carnes saludables y nutritivas. Proporcionan proteínas de alta calidad, vitaminas del grupo B, minerales como el hierro y el zinc, y tienen un bajo contenido en grasa. Su versatilidad en la cocina les permite adaptarse a diferentes gustos y recetas. Además, son una opción económica para celebrar en grande.
Por ejemplo, un pavo de 5-7 kilos puede servir a 10 personas, ofreciendo una cantidad suficiente para compartir. Y gracias a su bajo costo, puedes disfrutar de un plato espectacular sin sobregastar tu presupuesto familiar.
Cuando elegimos carne de aves, es esencial considerar su origen. Las aves criadas en España son de alta calidad, con un equilibrio en la alimentación y un respeto al bienestar animal. La Asociación Interprofesional Española de Carne de Aves, Avianza, promueve estos valores a través del sello “Aves de España”.
Este sello garantiza la sostenibilidad, el bienestar animal y la seguridad alimentaria. Al elegir carne de aves con este sello, estamos asegurando que traemos a nuestra mesa un producto de calidad superior, respetuoso con el medio ambiente.
Compartir un pavo asado en la mesa navideña tiene un significado simbólico profundo. Evoca sentimientos de unión familiar y generosidad. Es el centro de la celebración, un plato que nos une y nos permite crear recuerdos inolvidables.
Imagina la aroma que emana del horno mientras el pavo se cocina. Aquella sensación cálida y festiva hace que la Navidad sea aún más especial. Es un momento en el que nos reunimos y compartimos.
Ingredientes:
Un pavo (5-7 kilos) entero, ideal para 10 personas. 8 cucharadas de mantequilla sin sal. 4 ramitas frescas de tomillo, romero o salvia, o una combinación de ellas. Un limón cortado en cuartos. Sal y pimienta negra recién molida. 2 tazas de caldo de pollo o de verdura.
Preparación:
Prepara el pavo sacándolo de la nevera 30 a 60 minutos antes de cocinarlo. Precalienta el horno a 220ºC y coloca la rejilla en la parte inferior. Derrite la mantequilla en una cacerola a fuego bajo y añade las hierbas frescas para darle un aroma irresistible.
Unta y sazona el pavo por dentro y por fuera con la mantequilla aromática. Salpimenta bien, incluso debajo de la piel. Coloca las hierbas y los cuartos de limón dentro de la cavidad del pavo y vierte el caldo en la bandeja de asar. Sube las alas del pavo hacia abajo.
Hornea el pavo a 180ºC. Cada 27 minutos por kilo de peso, hornea el pavo. Un pavo de 7 kilos tardará aproximadamente 3 horas y 15 minutos. Utiliza un termómetro de carne para asegurarte de que la temperatura interna alcance al menos 75ºC.
Cada 30-45 minutos, rocía el pavo con la mantequilla y los jugos de la bandeja. Si la piel se dora demasiado rápido, cúbrela con papel de aluminio a mitad de cocción. Para comprobar si está cocido, tira ligeramente de una ala. Si se desprende fácilmente, estará listo.
Trucos para un Pavo Perfecto:
Para obtener una piel crujiente, utiliza una bandeja de horno con rejilla. Esto evita que el pavo esté en contacto directo con los jugos durante el asado. Si la piel se dora demasiado, cúbrela con papel de aluminio a mitad de cocción.
Para asegurar un pavo jugoso, no trincheslo inmediatamente. Déjalo reposar durante 15 minutos después de sacarlo del horno. Esto permitirá que los sabores se distribuyan uniformemente por toda la carne.