El torero Saúl Jiménez Fortes, originario de Málaga, ha resurgido con fuerza en el panorama taurino, especialmente tras su impactante faena en San Isidro que, aunque no culminó en la Puerta Grande, lo elevó a las alturas de la conversación taurina. Este regreso a la primera línea es el resultado de años de dedicación y una profunda evolución personal y profesional. Su retorno a su tierra natal, Málaga, con una doble presencia en la feria, es un merecido reconocimiento a su trayectoria y a su memorable actuación en el Sábado de Gloria, donde se alzó como triunfador de la temporada malagueña.
Fortes describe su regreso a Málaga como un momento muy especial, un desafío para superarse y devolver a la ciudad todo lo que le ha brindado. La Malagueta ha sido su refugio y el escenario donde, incluso en tiempos difíciles, ha forjado faenas de gran calado. Su evolución, que él mismo considera un proceso de una década, lo ha transformado en un torero diferente, buscando la emoción no a través del riesgo, sino a través de la belleza y la pureza en su arte. Este cambio se atribuye a un profundo trabajo mental y a la capacidad de aprender de cada experiencia, asumiendo la responsabilidad de su situación en todo momento. El diestro se prepara para importantes citas en Bilbao, una plaza que evoca el inicio de su carrera en 2011, y un esperado regreso a Madrid en la Feria de Otoño, con el anhelo de lograr esa Puerta Grande que se le escapó en San Isidro.
En un momento de madurez y plenitud, Fortes valora profundamente la oportunidad de compartir época con Morante de la Puebla. Para él, vivir el tiempo de Morante es una de las experiencias más significativas de su vida, considerándolo un privilegio ser testigo de la maestría de uno de los toreros más grandes de la historia. Esta admiración subraya no solo su respeto por la tradición, sino también su capacidad para reconocer y celebrar la grandeza en sus contemporáneos, enriqueciendo así el arte de la tauromaquia. La trayectoria de Fortes es un testimonio de resiliencia, crecimiento y una búsqueda incesante de la expresión artística, demostrando que la pasión y el compromiso pueden llevar a un renacimiento glorioso.