El gobierno municipal de Cali anunció la culminación definitiva del contrato para implementar un sistema de semáforos inteligentes, una medida crucial para evitar pérdidas adicionales de recursos públicos. Este cierre responde a múltiples hallazgos técnicos y legales que pusieron en evidencia deficiencias estructurales desde el inicio del proyecto. A pesar de desembolsos millonarios, el sistema nunca llegó a operar como se había planeado inicialmente. Entre las principales complicaciones destacan problemas de compatibilidad entre equipos, falta de pruebas adecuadas y ausencia de interventoría especializada.
El acuerdo original presentaba errores fundamentales desde su formulación técnica. Firmado en 2023, preveía una ejecución en apenas cuatro meses, lo cual fue considerado irreal por expertos en movilidad urbana. Esta insuficiencia inicial generó graves consecuencias durante su desarrollo.
Uno de los aspectos más controvertidos fue la distribución de pagos anticipados sin resultados concretos. Más del 84 % de los fondos asignados fueron desembolsados, sumando un total superior a $37 mil millones, pero el sistema no logró alcanzar su propósito central: transformarse en una red semafórica avanzada. Las intersecciones intervenidas funcionaban únicamente como semáforos convencionales debido a fallas en la integración tecnológica. Además, la fragmentación entre marcas y contratistas impidió que los dispositivos interactuaran correctamente.
Ante esta compleja situación, la administración actual decidió detener el flujo de recursos hacia este proyecto deficitario. El alcalde Alejandro Eder explicó que la decisión busca proteger el patrimonio público y establecer alternativas viables para mejorar la movilidad urbana en Cali.
Para garantizar un mejor enfoque, se priorizará la creación de soluciones técnicas sólidas respaldadas por criterios jurídicos y financieros responsables. Una de las lecciones clave obtenidas es la necesidad de contar con personal capacitado dentro de la institucionalidad municipal para manejar proyectos de alta tecnología. Asimismo, se reconoce la importancia de implementar procesos rigurosos de evaluación antes de iniciar iniciativas similares. Esto incluye pruebas exhaustivas, capacitación del equipo humano involucrado y la contratación de entes interventores especializados que aseguren el cumplimiento efectivo de los objetivos propuestos.